Víctor Valdés parece no ser santo de la devoción de muchos barcelonistas, pero sí lo es para quien debe serlo, su equipo y, sobre todo, su entrenador.
Las negociaciones parecían no ir demasiado bien encaminadas, hasta que finalmente la presidencia y el jugador se encontraron 'en el medio'. Por parte de Guardiola, Valdés es el portero para su equipo, y el club debía actuar en consecuencia.
Es fácil ver los fallos de un jugador cuando sólo se quiere ver éstos, lo que parece no ser tan sencillo, al menos en caso de Víctor, es tener en cuenta sus aciertos, que son muchos. Gracias a él, el Barça en los últimos años ha levantado importantes copas... entre ellas, y en parte por buenas actuaciones del catalán, dos copa de Europa. Thierry Henry seguramente estuvo teniendo pesadillas con Valdés tras la final perdida en París cuando el francés militaba en el Arsenal. Tampoco tendrá buenos recuerdos del portero del Barça el, ahora madridista, Cristiano Ronaldo, que se las vió en diversas ocasiones con Valdés en la final de Roma. Pero el '1' barcelonista ganó la partida al portugués que ahora intentará cobrárselo en Liga con su nuevo equipo.
Sin ir muy lejos, y hablando de la competición casera, Víctor ha sido ya en dos ocasiones Zamora de la Liga española, una cuestión complicada de conseguir en una Liga como la española, donde prima el juego en ataque.
Es el único jugador que Guardiola no ha sentado, a excepción de la Copa del Rey, que cedió a Pinto. Ya lo dijo Pep hace algunas semanas, el equipo son "Valdés y diez más".
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